Si analizamos al nuevo sistema mundo eurocéntrico capitalista militar patriarcal colonial moderno llegando desde Europa hacia América, pero situados como pueblos originarios de la zona del Gran Chaco en la década del 70 del siglo XIX, lo que se observa es la llegada de múltiples e imbricadas jerarquías de poder global. Todas estas múltiples jerarquías de poder global fueron novedosas para los pueblos originarios de la zona del Gran Chaco. Todas impactaron de manera enredada y compleja en todas las relaciones sociales de los pueblos originarios de la zona del Gran Chaco. Situarnos como pueblos originarios del monte chaqueño y vivenciar la corporalidad de las nuevas formas de dominación, entendidas como jerarquías mundiales, nos permitirá entender como impactaron en la realidad y subjetividad de los pueblos originarios estas jerarquías, cómo sobreviven hoy día, y cómo las reproducimos actualmente y entender además como nos gobiernan.
Para poder entender como opera un complejo sistema de jerarquias de poder hay que retomar los análisis interseccionales de la tradicion poltíca del pensamiento crítico de mujeres afroamericanas (Combahee River Collective, Angela Davis, Kimberlé Crenshaw), chicanas (Gloria Anzaldua) y latinoamericanas (Maria Lugones). Para entender la colonialidad del poder y como opera lo etno/racial como principio organizador del sistema-mundo capitalista, heteropatriarcal, imperial, estatal, racista, colonial/moderno hay que rescatar el pensamiento de autores negros decoloniales (Aimé Césaire, Frantz Fanon) y del marxismo negro caribeño (Cedric Robinson, Eric Williams, Oliver Cox, C. L. R. James, George Padmore, Lloyd Best, George Beckford, Walter Rodney, Rhoda Reddock, Stuart Hall).
Según Mara Viveros Vigoya: "Desde hace algunos años, la interseccionalidad se ha convertido en la expresión utilizada para designar la perspectiva teórica y metodológica que busca dar cuenta de la percepción cruzada o imbricada de las relaciones de poder. La interseccionalidad constituye una de las mayores contribuciones conceptuales del feminismo en los últimos veinticinco años. La luz que arroja en el estudio de los complejos mecanismos de discriminación ha permitido identificar la diversidad de las interacciones generadas por la subordinación de muy diferente tipo: por razones de género, orientación sexual, etnia, religión, origen nacional, (dis)capacidad, nivel socioeconómico y otras.
El concepto mismo de interseccionalidad fue acuñado en 1989 por la abogada afroestadounidense Kimberlé Crenshaw en el marco de la discusión de un caso concreto legal, con el objetivo de hacer evidente la invisibilidad jurídica de las múltiples dimensiones de opresión experimentadas por las trabajadoras negras de la compañía estadounidense General Motors. Desde su primera formulación por Kimberlé Crenshaw (1989), el concepto de interseccionalidad se ha desarrollado y elaborado en distintas maneras, transformando profundamente los estudios feministas. Habiéndose nutrido del pensamiento feminista afroamericano, el enfoque de la interseccionalidad ha permitido reconocer la complejidad de los procesos formales e informales que generan las desigualdades sociales."
Combahee River Collective fue una organización feminista negra y lésbica que operó en Boston, Estados Unidos entre 1974 y 1980. Segun la declaración del colectivo: "Una posición combinada antirracista y antisexista nos unió inicialmente y, a medida que nos desarrollamos políticamente, nos enfocamos en el heterosexismo y la opresión económica bajo el capitalismo". El nombre del colectivo de mujeres lesbianas fue sugerido por Barbara Smith, en conmemoración de una operación militar planeada y liderada por Harriet Tubman (mujer afroamericana) el 2 de junio de 1863 en el río Combahee. Harriet Tubman fue una luchadora por la libertad de los afroamericanos esclavizados en Estados Unidos. Tras escapar de la esclavitud, realizó trece misiones de rescate en las que liberó a cerca de setenta esclavos, usando la red conocida como ferrocarril subterráneo (fue una red clandestina organizada en el siglo XIX en Estados Unidos y Canadá para ayudar a los esclavos afroamericanos que escaparan de las plantaciones del sur hacia estados libres o Canadá. El nombre de «Ferrocarril Subterráneo» viene por el hecho de que sus miembros utilizaban términos ferroviarios de modo metafórico para referirse a sus actividades. Por ejemplo, los conductores o maquinistas eran quienes ayudaban a los esclavos fugitivos en los propios estados esclavistas de Sur. Les proporcionaban disfraces, mapas, instrucciones sobre sitios para hospedarse y en ocasiones los acompañaban guiándoles durante el trayecto). El último año de la Guerra Civil en Estados Unidos, Tubman se convirtió en la primera mujer en dirigir un asalto armado. Tubman guió tres barcos de vapor a través de las aguas confederadas (que se encontraban llenas de minas) hasta tierra firme. Más de setecientos esclavos fueron rescatados en la operación de Combahee River.
Como señala Ramon Grosfoguel: "Las intelectuales chicanas y las feministas negras (Combahee River Collective, 1977; Bell Hooks, 1981; Audre Lorde, 1982; Angela Davis, 1983; Cherrie Moraga y Gloria Anzaldua, 1983; Hill Collins 1990; María Lugones, Norma Alarcón, Chandra Talpade Mohanty, entre otras) así como intelectuales del tercer mundo dentro y fuera de los Estados Unidos (Dussel, 1977; Mignolo, 2000) nos recordaron que siempre hablamos desde un lugar en particular en las estructuras de poder. Nadie escapa a la clase, lo sexual, el género, lo espiritual, lo lingüístico, lo geográfico y las jerarquías raciales del «sistema mundo moderno/colonial capitalista/patriarcal». Según afirma la intelectual feminista Donna Haraway (1988), nuestros conocimientos siempre están situados.
El punto central es el locus de la enunciación, es decir, la ubicación geopolítica y cuerpo-política del sujeto que habla. En la filosofía y las ciencias occidentales, el sujeto que habla siempre está escondido, se disfraza, se borra del análisis.
La «ego-política del conocimiento» de la filosofía occidental siempre ha privilegiado el mito del «Ego» no situado. La ubicación epistémica étnica/ racial/de género/sexual y el sujeto que habla están siempre desconectadas. Al desvincular la ubicación epistémica étnica/racial/de género/sexual del sujeto hablante, la filosofía y las ciencias occidentales pueden producir un mito sobre un conocimiento universal fidedigno que cubre, es decir, disfraza a quien habla así como su ubicación epistémica geopolítica y cuerpo-política en las estructuras del poder/conocimiento coloniales desde las cuales habla."
Como también señala Ramón Grosfoguel, para poder entender como el sociólogo peruano Anibal Quijano llego a la idea de la colonialidad del poder, hay que rescatar la tradicion del pensamiento afrocaribeño de influencia marxista, que pensó y teorizó, desde una posición subalterna, la caracterización del sistema-mundo capitalista como un proceso civilizatorio donde hay multiples jerarquías de poder, y no solamente, un sistema económico centrado en la opresión de clase para generar plusvalor.
"¿Qué significa pensar decolonialmente desde el Gran Caribe?"
Aquí quiero señalar la importante contribución de Nelson Maldonado-Torres (2006a, 2006b), quien ha insistido en múltiples ocasiones en que, al contrario al pensamiento latinoamericano que pretende pensar desde un continente, el pensamiento decolonial afroa-caribeño es 'postcontinental' o podríamos decir 'transcontinental', porque piensa desde una posicionalidad subalterna en las relaciones de dominación más allá de una geografía continental. Mientras el pensamiento latinoamericano privilegia el pensamiento continental como geografía de la razón, el pensamiento caribeño privilegia el pensamiento desde la figura del Calibán, desde el humano esclavizado que se enfrenta al amo Próspero, desde el sujeto inferiorizado racialmente, desde el pensamiento crítico que se produce en la zona del no-ser fanoniana enfrentándose a la zona del ser, desde el lado subalterno de la dominación colonial/racial (Lamming, 1960; Césaire, 1969; Fernández Retamar, 1971).
La figura del Calibán como lugar de enunciación representa una crítica radical al pensamiento y las filosofías continentales. Sabemos que no todo pensamiento crítico es decolonial. Muy bien se puede ser originario del Caribe geográfico y pensar eurocéntricamente en el plano epistemológico. Igualmente se puede pensar desde el continente latinoamericano y reproducir el pensamiento eurocentrista. No basta con pensar desde una geografía. Las filosofías continentales tienen el problema de no tomar en cuenta el pensamiento crítico que se produce desde las zonas del no-ser de sus propios continentes, homogeneizando la diversidad epistémica de estas regiones. No se puede asumir el reduccionismo geográfico de que, si se piensa desde una geografía continental diferente a Europa, ya de por sí se está produciendo pensamiento crítico o pensamiento decolonial frente al eurocentrismo. Para producir pensamiento decolonial es fundamental pensar desde el pensamiento crítico que se produce en la zona del no-ser de las relaciones de dominación y explotación del capitalismo racial, es decir, desde la experiencia de los condenados de la tierra que viven la violencia y el despojo constante y no como excepción. Lo que caracteriza el pensamiento decolonial afro-caribeño es su mirada crítica desde la posicionalidad de Calibán, su mirada trascontinental. Esto hace posible un diálogo trasmoderno Sur-Sur (Dussel, 2015) entre los calibanes de civersos lugares del mundo.
El Gran Caribe como laboratorio de los imperialismos occidentales
El caribe, como una de las regiones donde comenzó la expansión colonial europea hace más de 500 años, y como lugar donde los diversos imperialismos occidentales han hecho sus laboratorios de dominación mundial, ha permitido al pensamiento decolonial afro-caribeño la producción de pensadores y pensdoras que han sido muy influyentes, a escala mundial, en sus diagnósticos y propuestas frente al capitalismo-moderno-colonial-imperial. Autores y autoras como Walter Rodney, Frantz Fanon, Silvia Wynter, Claudia Jones, Aimé Césaire, Clive Thomas, Paget Henry, Jamaica Kincaid, GEroge Padmore, C.L.R. James, Eduoard Glissant, Norman Girven, Stuart Hall, y muchos(as) otros(as) han sido leídos más allá del Gran Caribe, en África, Asia, América Latina y Europa. LAmentablemente, con excepción de Fanon y más recientemente Stuart Hall, han sido desconocidos en América LAtina. Igualmente ocurre con pensadores y pensadoras decoloniales afro-nordestinos brasileños; como Silvio Humberto Dos Passos Cunha, Angela Figueiredo, NAdia Cardozo, Wilson Roberto Mattos, etcétera.
Pero existen también muchos otros pensadores y pensadoras decoloniales afro-caribeños(as) que, aún escribiendo enc astellano, han sido ignorados y son todavía desconocidos en América Latina. Me refiero a intelectuales del Caribe hispanófono como Walterio Carbonell, Juan René Betancourt, CArlos Moore (también ha escrito en portugués, inglés y francés), Angel Pinto Albiol, Sixto Gastón Aguero, Aquiles Escalante, José Luciano Franco, Wilmer Villa, Ochy Curiel, Sandalio Junco, Ernell Villa, Jesús Colón, Arturo Schomberg, Manuel Zapata Olivella, Nancy Morejón, Nelson MAldonado-Torres, Jesus 'Chucho' García, etcétera.
La experiencia de enfrentarse a varias estrategias imperiales, de haber sufrido durante siglos la esclavitud en las plantaciones del capitalismo racial, de haber sido y, en algunos casos, seguir siendo colonias directas de varias metrópolis occidentales, posibilitado una mirada transversal de crítica decolonial con una rica producción de categorías conceptuales que han sido útiles en los procesos de liberación antiimperialistas, anticoloniales y anticapitalistas en otras partes del mundo. Esta experiencia compartida en el Gran Caribe ha sido vital para la producción temprana de pensamiento antiimperialista decolonial, mucho antes que otras regiones del mundo que fueron colonizadas uno dos, tres y hasta cuatro siglos despues de 1492. La excepción a esta tendencia de colonización caribeña en la modernidad temprana son las islas Canarias y la civilización musulmana en la Peninsula Ibérica, conocida como al-Ándalus, que fueron conquistadas por la Corona castellano-aragonesa en el siglo XV, y algunas regiones de la costas de África y la región de Kerala en el sur de la India, que fueron conquistadas por los portugueses también en el siglo XV. Estas experiencias de colonialismo son muy immportantes para entender los procesos de colonización en las Américas. De manera que no sólo hubo resistencias, sino pensamientos decoloniales contra la modernidad/colonialidad desde muy temprano en la historia de la expansión colonial europea. Para ilustrar este punto tomemos de ejemplo algunas experiencias de genealogía decolonial desde el siglo XVI en diversas partes del mundo.
1) La fatwa de Shaykh Zainuddin Makhdum en 1583 en Kerala contra los portugueses (Makhdum, 1990).
2) El documento Nican Mopohua producido en 1548 por la comunidad indígena de Tlatelolco compuesta de cuatro tlamatinimes nahuas y 6 intelectuales indígenas del Colegio de la Santa Veracruz de Tlatelolco (Contreras Colin, 2017).
3) El pensamiento político decolonial de la resistencia afro-colombiana desde el siglo XVI en Palemque, en la costa caribeña de Colombia, hasta nuestros días (Arboleda Quiñonez, 2011).
Hay muchos textos decoloniales antiguos en diversas partes del mundo. El asunto es que buena parte de este pensamiento decolonial era oral, y donde había escritura, han sido muy dificiles de conseguir, porque unos fueron destruidos y otros se encuentran en los archivos coloniales de los imperios metropolitanos. En el Caribe tenemos experiencias de resistencias decoloniales tempranas, dirigidas por líderes taínos y, más adelante, por africanos esclavizados (Williams, 1971)."
Primeramente quisiera aclarar, que no es capitalismo lo que llega a los territorios del Abya Yala (América), al contrario, las jerarquias raciales, hetero patriarcales, cristianas, estatales e imperiales imponen por la fuerza un sistema de trabajo esclavizado, coercitivo, que luego de un tiempo generaría las mercancias que se venderían en ese nuevo mercado mundial produciendo plusvalor, y recien ahi, se generaría al mismo tiempo que se expande, el sistema capitalista mundial, que sería la cara económica del sistema civilizatorio. Es verdad, que en un corto período de tiempo se genera esa veta capitalista del sistema civilizatorio. El sistema capitalista se genera a medida que se expande la colonizacion de los pueblos de Abya Yala y la esclavizacion forzada de población africana que es secuestrada y obligada por la fuerza a trabajar en los territorios colonizados del Abya Yala. La resistencia de los pueblos indígenas del Abya Yala impide, en un primer momento, la explotación forzada del trabajo para producir mercancias, es por eso que se necesita recurrir a la mano de obra esclavizada de la población de África para la formacion de ese sistema capitalista. Este proceso no se produce de un día para otro. Las primeras mercancias que alimentan ese mercado mundial, al principio son producto del pillaje y el intercambio mediante el engaño de los pueblos indígenas.
Según el historiador argentino Horacio Machado Aráoz, en su libro "Potosí, el origen. Genelogía de la minería contemporanea", asume que el capitalismo nació en la zona andina de Potosí, más precisamente en el cerro Rico. La mitad de toda la plata que llegó a España fue saqueada de este enclave minero. Potosí seria entonces el nodo que daria comienzo al capitalismo tal como lo conocemos hoy en día y la plata extraida de las entrañas del cerro Rico de Potosí sería su fuente de financiamiento. En Potosí nacio la minería moderna y su riqueza le permitió a España constituirse en el primer estado nación moderno. Este trabajo de historizar el capitalismo invita a deconstruir la mirada eurocéntrica del origen del capitalismo. Según esta investigación que tiene el prólogo de Maristella Svampa, el capitalismo no se gestó en alguna zona de Europa, sino en las entrañas mismas de la zona andina que hoy conocemos como Bolivia.
Ramón Grosfoguel alcanza a definir 16 jerarquias de poder globales que se imbrican entre sí de manera compleja y enredada, conformando un sistema civilizatorio heterárquico. Quisiera agregar algunas jerarquías para ayudar a complejizar, aún más, este sistema civilizatorio de muerte que llega a los territorios del Abya Yala.
1) Con la colonización llega una jerarquia global de poder que privilegia una forma de habitar el territorio. Se privilegia el sedentarismo y se persigue y criminaliza el nomadismo de población. Si bien en los territorios del Abya Yala había pueblos indígenas que habitaban ciudades y pueblos, la gran mayoría de pueblos practicaban el nomadismo y estaban organizados en clanes de cazadores recolectores.
2) Con la colonización llega una jerarquia global de poder que determina que especies animales y vegetales va a coexistir con los humanos en el territorio colonizado. La colonización de población trae consigo especies animales y vegetales del ecosistema europeo, que es introducido por la fuerza, en detrimento de las especies animales y vegetales del Abya Yala. Los animales autóctonos seran perseguidos, cazados y exterminados, la flora nativa sera reemplazada por cultivos que prioricen las necesidades del modelo civilizatorio europeo. Con el tiempo también serán talados la gran mayoría de especies arboreas de los ecosistemas de selva, monte y bosque nativos. La civilización europea tiene en sus genes el modelo de deforestación que heredó de las migraciones de población que llegaron de las civilizaciones de Medio Oriente y Egipto, que generaban la domesticación de los ecosistemas, priorizando monocultivos agrícolas, la ganadería intensiva, la urbanizacion y el represamiento de los cursos de agua, que va en detrimento de las especies arboreas y los animales autóctonos.
3) Con la colonización llega una jerarquía global de poder que determina que territorios seran sacrificados para la produccion de mercancias, y que territorios seran conservados para el usufructo, asentamiento y disfrute de las élites. Esta jerarquía también definirá los límites donde vivirán las clases subalternas, explotadas y colonizadas; y por otro lado, donde vivirán las poblaciones que gocen del privilegio racial y de clase. Con los procesos de colonización se incrementaran las zonas de sacrificio, como los rios y lagos, zonas costeras, zonas mineras, zonas de deforestación, zonas de humedales que seran secados para el proyecto colonial moderno. Estas zonas de sacrificio implicarán un deterioro de los ecosistemas, un deterioro medioambiental, la desaparición de la diversidad de la vida por un paisaje homogeneo de muerte y contaminacion. Por lo general estos territorios seran los que el sistema colonial moderno permitirá para el asentamiento de los pueblos inferiorizados.
4) Con la colonización llega una jerarquía global de poder que privilegia la lecto/escritura sobre la tradición oral. Aquellos pueblos que no tenían escritura fueron inferiorizados. La mayoría de pueblos del Abya Yala no necesitaban la escritura, se basaban en la tradición oral que pasaba de generación en generación y estaba al alcance y entendimiento de todos. Cuando se da el avance de la colonizacion, en Europa la escritura era considerada un atributo de privilegio, status y poder. No todas las personas tenían acceso a la lectura y escritura.